Después de competir por el control de Usiminas hace unos diez años, la Companhia Siderúrgica Nacional (CSN), dirigida por el empresario Benjamin Steinbruch, comenzó a vender las acciones que posee de su competidor de Minas Gerais.

El viernes pasado, 56 millones de acciones preferentes de Usiminas, que son las que no tienen derecho a voto, fueron vendidas por una transacción que movió R$ 1,3 mil millones, según información de Estadão. Esta es la mitad de la posición de 20% que tiene CSN en las acciones preferentes de la empresa.

La decisión de CSN es poseer acciones ordinarias, que tienen derecho a voto. Sin embargo, por decisión del Consejo Administrativo de Defensa Económica (Cade), la siderúrgica no puede ejercer sus derechos políticos, ya que es una empresa competidora.