Hasta el viernes pasado, los precios de los laminados en caliente en el mercado brasileño bajaron por fin tras estar a un nivel estable durante 10 semanas. El principal factor de esta caída de precio debe de ser la demanda débil de la industria automotriz. Entretanto, según los participantes del mercado local, con el exceso de oferta que siempre existe, los precios pueden bajar más en el futuro.
En este momento, los principales compradores del mercado brasileño piden más descuentos a los proveedores y la mayoría de los proveedores se apresuran a vender sus productos cuanto antes. Una predicción concreta ha indicado que en mayo, los precios de las chapas podrían experimentar una otra caída de 10% a 15%.